Relajadas, las medidas sanitarias en Beach Fest

Relajadas, las medidas sanitarias en Beach Fest

El primer concierto masivo de playa, “Baja Beach Fest”, celebrado este fin de semana en Playas de Rosarito, generó opiniones encontradas entre la población por los más de 20 mil asistentes con el semáforo epidémico en color amarillo y en medio de la tercera ola de contagios de coronavirus en Baja California.

Hay quienes creen que esto generará cadenas de contagios mientras el sector salud, que autorizó el evento, anuncia un aumento de casos activos en el estado con mil 154 y coloca a Rosarito como región binacional con el mayor número de casos en la incidencia por cada 100 mil habitantes, con 43.6.

“Está muy mal que den esos permisos, miles llegaron a divertirse sin cuidar su salud, muchos ya borrachos no usaban cubrebocas y no había distanciamiento. La zona turística, un caos, los turistas van a enfermar a los rosaritenses que tienen que salir a trabajar”, comentó Estela Campos, una habitante de ese municipio que perdió a su madre a causa de Covid durante la segunda ola de contagios, en enero del 2021.

En contraparte, prestadores de servicios como Orlando Hernández, miembro de la Asociación Unión de Comerciantes y Artesanos de Baja Norte AC, dicen que es un riesgo que asumen para reactivar la economía después de un año y cinco meses sin ingresos económicos.

“Tenemos un aumento de hasta el 80% de las ventas, es un riesgo que se tenía que tomar porque es peor que los negocios mueran y la reactivación económica no se dé”, apuntó.

Por otra parte, el secretario de Salud en Baja California, Alonso Pérez Rico, señaló que no hay riesgo de cadenas de contagios de coronavirus porque el 78.21% de los bajacalifornianos están vacunados, y dos millones 108 mil 402 personas tienen completo su esquema.

Aseguró que el 90% de los asistentes al evento estaban vacunados, y esto se verificó a través de una pulsera digital, según él una tecnología nunca antes utilizada que podría continuar en los siguientes eventos masivos del estado.

“No se ha hecho en ninguna parte del planeta (revisión de entrada con pulsera digital), para poder tener este aforo. Para tú poder entrar a este evento, tenías que comprobar digitalmente en plataformas oficiales que estabas vacunado o que te habías realizado la prueba de Covid en laboratorios de Estados Unidos y que saliera negativo en las últimas horas”, explicó.

Las pulseras digitales tienen un proceso de verificación de vacuna con base de datos de la Unión Americana y México, según Aron Ampudia, representante del bar Papas & Beer.

Esas pulseras de nueva tecnología estuvieron siendo revendidas en grupos de facebook por entre 350 y 900 dólares, aunque según los organizadores, solo tenerla no garantiza el ingreso.

“Tienes que pasar por un proceso de verificación de tu vacuna, subes tu comprobante, el sistema lo verifica con la base de datos de Estados Unidos, sí es de americano. Si es mexicano, lo hace igualmente con su CURP y se activa tu bandita. Si no tienes activada tu bandita, ese escáner se pone rojo (…) todos los que compraron un boleto, bajan la aplicación, suben su comprobante y en 24 horas se verifica.”

Algunos usuarios en redes sociales hicieron mofa de la seguridad de las pulseras y dijeron que hubo quienes las compartieron con otras personas para ingresar, pero esto no pudo ser comprobado.

En cambio, la alcaldesa de Rosarito, Aracely Brown Figueredo, desestimó las relajación de las medidas sanitarias registradas durante el evento, sobre todo en el uso del cubrebocas.

Afirmó que se trata de un asunto “cultural” de los visitantes y no existe ley que los obligue a utilizarlos, aunque al final mencionó que reforzarán las medidas sanitarias en los próximos días.

“El 95% de los visitantes viene del extranjero, de diferentes países, principalmente de Estados Unidos, pero es una cuestión cultural, allá no usan cubrebocas”, dijo en conferencia de prensa.

Por su parte, Mario Escobedo Carignan, secretario de Economía Sustentable y Turismo, informó que gracias al festival se registró un 100% de ocupación hotelera en Playas de Rosarito con dos mil 213 cuartos; en Tijuana, con ocho mil 114 y en Ensenada, con cinco mil 150, además de una derrama económica de más de 580 millones de pesos.

“¿Podrá haber contagios?, Seguramente (…) Primero Dios este evento no va a generar ningún brote”, dijo confiando en las medidas de prevención.

Para el siguiente fin de semana, del 20 al 22 de agosto, se espera otro concierto masivo del “Baja Beach Fest”, y según la página oficial se ha vendido ya el 85% de las entradas.

La alcaldesa Aracely Brown desestimó las relajación de medidas, sobre todo en el uso del cubrebocas, aunque al final mencionó que las reforzarán