Sospechan fraude en venta de vuelos

Sospechan fraude en venta de vuelos

Tijuana.- Eran boletos demasiado baratos para ser verdad, y aunque el mismo nombre de la agencia: “Utopía”, podría parecer una advertencia, decenas de personas los pagaron y hoy no tienen garantía de sus vuelos ni sobre la devolución de su dinero.

Los viajes redondos a distintos estados por entre mil y dos mil pesos, o un paquete para dos personas a Cancún, tres días y dos noches, con hotel y desayuno incluidos por cuatro mil 800 pesos, y otras promociones similares, fueron demasiado tentadoras.

Susana Díaz y Guadalupe Roque cuentan que vendieron viajes hasta que el representante de la supuesta empresa en línea canceló todo sin una explicación clara luego de que en mayo comenzaron las complicaciones con vuelos ya pagados.

Según estimaciones de las dos mujeres que colaboraban bajo un contrato verbal a cambio de pagos en efectivo y viajes, solo entre sus ventas hay arriba de un millón de pesos “flotando” con más de 200 vuelos, algunos de ellos grupales, que estaban programados para despegar entre julio de este año y febrero del 2021.

Mientras platican cómo se vieron atraídas cuando conocieron a amigos que viajaban seguido con poco dinero, y cómo terminaron repartiendo mensajes vía WhatsApp con ofertas de vuelos, no dejan de recibir en sus celulares reclamos por las cancelaciones para las que hasta ahora solo hay una vaga promesa de reembolso.

Aseguran que las han amenazado con interponer denuncias en su contra, para lo que dicen estar preparadas con pruebas de los depósitos al responsable en siete cuentas distintas, pero hay otras advertencias que las hacen temer por su seguridad.

En junio se presentó una campaña ante fraudes en viajes. Foto: Daniel Ángel Rubio | El Sol de Tijuana

“Lo quiero publicar porque quiero que él sienta tantito lo que nosotras estamos sintiendo. No sé si lo van a encontrar, si lo van a castigar”, respondió Susana después de leer el mensaje de un familiar en su teléfono.

“Nada más para decirte que afuera de la casa está un señor en una camioneta verde. Preguntó por ti”.

LAS VENTAS Y LOS PROBLEMAS

Guadalupe fue la primera en involucrarse. Era 2019 y un conocido que viajaba constantemente le dio la receta: el contacto con un familiar que conocía a un tercero que conseguía los boletos.

Las compras normalmente eran con meses de anticipación, como sucede cuando cualquier vacacionista busca ahorrar, pero los pases de abordar siempre tardaban en llegar.

Fueron dos años de ventas y viajes hasta que en marzo de este año se reencontró con Susana luego de muchos años, y atraída, ella repitió el camino: primero Guadalupe fue su intermediaria para comprar boletos con unas amigas, y después comenzó a vender por su cuenta.

Cuentan que comparten no solo una amistad de 12 años, sino también una carrera en ventas, por lo que junto al bajo costo de los boletos, no les resultó complicado cerrar tratos.

Por cada cinco boletos que ellas vendieran, recibían uno como su pago y ese lo podían vender si quisieran el dinero en efectivo.

Las promesas de “bonos” por hasta 14 mil pesos que dicen nunca llegaron, y otras ganancias por su productividad, eran otros incentivos. Todo hasta que comenzaron los problemas.

Hubo clientes que no pudieron subir al avión aunque tenían pase de abordar en mano, otros fueron reprogramados de última hora y unos más se quedaron sin vuelo de regreso.

En 2019, los fraudes en boletos representaron cuatro mil 500 mdp. Foto: Daniel Ángel Rubio | El Sol de Tijuana

La respuesta para los afectados era que podían pagar sus boletos de nuevo, pero ahora en el aeropuerto y ante las aerolíneas, con el compromiso de que habría reembolsos.

Las dos vendedoras aseguran que sí hubo algunos reembolsos menores, pero ahora han tenido que poner de su dinero para cubrir algunos de esos compromisos.

Así, hasta que a finales de junio el representante de la agencia les avisó que detendría los servicios por la cantidad de problemas que según él eran responsabilidad de sus proveedores, y se deslindó de “Utopía”.

“Vamos a dejar de trabajar con esta compañía”, le dijo a Susana en un audio de voz que compartió a este diario.

Aseguran que la agencia hablaba de convenios con cinco proveedoras y siempre entregaba boletos de tres aerolíneas.

Lo prueban con decenas de copias de los depósitos que los compradores hacían a las distintas tarjetas bancarias, de tiendas departamentales o autoservicio, y los comprobantes que ellas entregaban a los clientes.

El problema es que ahora, cuentan, él se deslindó argumentando que comenzará otra compañía, y la mujer que se supone se encargara de los reembolsos a nombre de Utopía, no siempre responde a los llamados y jamás la han visto físicamente.

La promesa es que esta semana comenzarán a devolver el dinero, pero después de tantos rodeos y problemas, tanto Susana como Guadalupe desconfían de que eso suceda.

SEÑALES DE ALERTA Y LA FISCALÍA

Utopía no tiene portal de internet ni perfil en facebook; su representante nunca recibió a Susana o a Guadalupe en alguna oficina, y ellas tampoco saben de algún domicilio para localizarlo. “Son cositas que debimos haber detectado, pero no. Teníamos confianza”, dice Guadalupe Roque.

“Sí estaban sucediendo las cosas, la gente volaba”, agrega inmediatamente después Susana Díaz, quien tiene varios viajes familiares programados para la segunda mitad de este año.

Dice que para ella una agencia de viajes en línea en medio de la pandemia, el argumento de no tener un portal para evitar las quejas de usuarios y conseguir boletos baratos con anticipación eran cosas que tenían sentido.

“Fuimos demasiado inocentes”, dijo durante una llamada telefónica previa a la entrevista.

Susana y Guadalupe saben que hay al menos una persona más que vendía boletos de avión para “Utopía”, y desconocen si hay más.